And the sunlight clasps the earth: crónica de una quemadura anunciada

Sábado 28 de noviembre

Salí de francés, contenta porque ahora los asientos son acolchonados. Puede ser muy peligroso cuando uno viene dormido.Hoy es un día peronista: algo de calor (lo suficiente como para ponerse vestido), algo de sol (matutino), algo de vientito. Aramis y Darth Vader van a andar en bicicleta, para aprovechar el día yo voy a leer a la terraza.

Subo malhumorada después de almorzar porque no tengo libros que combinen con este clima. ¿Tendrán libros adecuados los peronistas? No le debería haber regalado la escolástica a mi hermano. Releo el final de "To the lighthouse"y avanzo un poco con Durrell. Leo un rato a la sombra, pero Durrell no sirve bajo el sol así que mejor mirar el cielo. Me quedan veinte minutos porque ya me estoy cagando de calor, pongo las piernas al sol y quince minutos después las tengo blancas casi transparentes con ronchas rojas. Mejor vuelvo a la cocina.

En el taller comí budín de banana, riquísimo. Mis piernas ahora están de color bermellón, hinchadas. Arden y pican. Camino a la parada de colectivo y mis piernas están prendidas fuego. Pobre Juana de Arco.

Llego a la casa de Atos, Aramis y yo nos encontramos en el colectivo. Mis piernas están más rojas y ahora me apareció un manchón en el brazo derecho y dos círculos en los empeines, como si fueran dos mejillas. Preocupante. Darth Vader da la sentencia perfecta: mis piernas son dos Palitos de la Selva (el frente está rojo, el resto está blanco).

Domingo 29 de noviembre

Ayer vimos "Adulterio" ("We don't live here anymore" menuda traducción), qué ganas de morir, era tan aburrida. Lo único bueno fue que en una colaboración artística Aramis y yo inventamos el término "prêt-à-poner" para describir el comportamiento del personaje de Markrúfalo, mientras yo tenía hielo en las piernas y Darth Vader se quejaba desde la cocina. Me fui a dormir antes que todas, moría de sueño. Me desperté después de Darth Vader, Atos ya no estaba en la cama. Desayunamos mucho y muy rico, mis piernas están color helado de frambuesa. Me siguen ardiendo. El diálogo de la mañana:

-Es un escritor joven, bastante...pero no sé cuán joven.

-Tiene 15 años, es el hermano de Cumbio.

Hilaridad.

Llego a casa, mi familia me reta por haberme expuesto al sol. Mientras me baño me divierto con el contraste entre la espuma del jabón Limol - Frescura Océanica (que promete más frescura de la que da) y mi piel. Me seco con golpecitos suaves para que no me duela, el toallón es fucsia, estamos en composé. Me pongo lo que queda de Dermaglós para aliviar la piel y me voy a estudiar a Durkheim.

"stephenfry. Oh, when Morrissey is teasy and funny and silly and sweet I just want to DIE of pleasure...", Cerati tiene amigdalitis y Terranova está aburrido. Twitter es de ver para creer.

Lunes 30 de noviembre

Pero la puta que me parió. Las piernas siguen igual. Sólo el empeine derecho parece haber mejorado, pero apenas. La única diferencia: ahora me duelen más. Me raspan las sábanas, me raspa el pijama, me raspa la vida. Y encima ahora la piel está tirante, entonces me duele caminar, porque me tira en los tobillos. Ni hablar de movimientos más sofisticados como ponerme en cuclillas. Cambio potencialmente positivo: a través del rosa chicle Bazooka, que no cambió, se empiezan a vislumbrar las pecas. Supongo que eso significa que mi piel está asimilando la exposición al sol. La próxima me voy a poner un stencil así después me queda "imbécil" escrito en blanco sobre la pantorrilla y no tengo que dar explicaciones. Puta piel de inmigrantes, y eso que soy como la sexta generación nacida y criada acá. Supongo que lo mío es pura mala leche.

Señales de cambio: antes dolía más la pierna derecha, ahora duele más la pierna izquierda. Mi rodilla derecha ya no está hinchada. Hoy me divertí deslizando el dedo índice desde mi empeine hasta mi rodilla y viendo como quedaba una estela. Inmediatamente después me arrepentí, cómo me dolió.

Miro las imágenes de Ushuaia en Estudio País, miro el texto de Marx que tengo adelante mío, miro mis piernas y ya no están tan rojas. Están de un color rosa de tapa de novela erótica, los bordes están igual de bien delineados, parecen placas psoriásicas. Pero el sol no ayuda, no soy Pauls ni Updike. Muerte al sol, hay que vengarse por todos los Ícaros. Mi hermana tenía una muñeca que se bronceaba, yo nunca la vi pero escuché las anécdotas. ¿Cómo era la fotografía del tipo que se bronceaba con el libro en el pecho? Puta madre, piernas quemadas y mala memoria. Encima me quemé un dedo con té. Puta madre.

Martes 1 de diciembre

Tierra a la vista, mis piernas ya no están calientes y ahora están de un color tipo rubor de corte francesa (?). El único problema es que están empezando a pelarse, y pican mucho. Si estoy distraída y me rasco, duele como la recalcate conch of your sister. Sumado a eso, picaduras de mosquitos múltiples. Hoy voy a probar ponerme crema Johnson & Johnson. Si no me arde, es que ya estoy bien, ¿no? LA pierna izquierda está igual, eso es un poco problemático, pero supongo que es más testaruda o más sensible. Los bordes de la quemadura ya están difuminados, veo una luz al final del túnel, ¿quién dijo que todo está perdido?

Me puse crema y no me dolió; creo que estoy bien.