So sinister, so sinister, but last night was wild.

Y sí. La emoción del recital de Franz Ferdinand me perdura. Sin embargo, ni este artículo ni ningún otro va a reseñar un recital irreseñable (?), genial, glorioso, increíble. No alcanzaría toda la internet para hacerle justicia. Dejémoslo ahí.
Este artículo pretende reseñar la última aventura de este grupete de parodias de saltimbanqui que ayer, con motivo del cumpleaños de uno de sus miembros más participativos, decidió finalmente dejar el cascarón y asomar la nariz a la noche porteña.

· El Plan: juntarnos a las 8 en la Base Barracas. Cenar. Comer brownies presuntamente punks. Disfrazarnos de glam-people y salir a cualquier lugar, a "hacer face" como quien dice (¿quién dice?). Ser gedes. Tener onda.

· Lo que terminó siendo: por mi parte, esperé 50 minutos el colectivo, así que llegué 50 minutos tarde (20.50) y fui la primera en llegar. A las 21.30 llegó Darth Vader, pedimos empanadas, vimos un programa en el bendito Canal 9, en que un montón de aparatos intentaban romper diversos records Guiness, entre ellos: la mayor cantidad de naipes pasados con la boca entre boy scouts, la mayor cantidad de rodetes armados en un minuto, la mayor cantidad de giros con la cabeza (el briquindáns, ¿ubicái?) y demás cosas que no recuerdo. Terminó ese programa y empezó Sex and the City. Sí, amigo, exactamente, ese programa poco representativo de mujeres y hombres y denigrante para la raza humana en general. Ese mismo. Richard Dawkins dice que si seres superiores visitan la Tierra, su manera de determinar si somos inteligentes sería averiguar si sabemos de qué se trata la evolución. Yo no quiero contradecir a tan intachable científico, pero yo creo que aunque tengamos la línea evolutiva más aprendida que ellos, aunque los niños terrícolas nazcan con El origen de las Especies bajo el brazo, si Sex and the City sigue al aire, es un claro indicio de que no podemos llamarnos inteligentes.
A todo esto, eran las 23.24 y a las 23.30 teníamos que ir a buscar a Athos, así que lo llamamos para ver por dónde andaba. La respuesta fue que "en Cabildo y Juramento", así que pudimos ver bastantes capítulos de S&TC, comer brownies verdes sobre los cuales rezaba la leyenda "¡Bitch" (sic), y ver The Mighty Boosh con Darthy, quien inmediatamente pidió ver otra cosa (no se impregnó con la magia del absurdo... aún).
A las 00.10 fuimos a buscar a Athos a la vuelta de la casa de Porthos. Descubrimos que sinceramente hacía un frío polar, y vimos bajar a nuestra amiga en musculosita. Al instante intentamos entregarle calor corporal pero ella declaró que no lo necesitaba, y que si hacía tanto frío era porque nuestra ciudad se corrió hacia el oeste y nos estamos cayendo al Pacífico al tiempo que nos estamos convirtiendo en Chile y hay que practicar el acento (¿cachai?).
Al punto, la única que estaba disfrazada era Porthos, cuyo concepto, según ella misma definió, era "lolita taiwanesa electro gótica". Juro que le había salido bien. Pero necesitábamos 3 disfraces más, así que para la 1.46, contábamos, entre peinados, maquillajes y ropas de colores diversos, con:
1. Kate Nash meets Pippi Longstocking: vestido verde, medias largas azules, zapatillas de jean, aros verdes, uñas pintadas de naranja, dos colitas y 3 pecas en cada mejilla, dibujadas con delineador violeta.
2. Industrial Gothic Dark de la Bond Street meets Amy Winehouse: vestido negro, medias verdes, zapatillas Topper, 3 muñequeras de cuero, pelo batido y levantado con un guante (lo juro).
3. Clown Puan funky pop: vestido de todos los colores del arco iris, pantalón verde, saquito verde y pavos reales en los ojos.
4. Glam folk hardcore hippie chic: vestido de flores, medias negras caladas, polainas norteñas, botitas de gamuza, remera de Plaza Sésamo.

PERO, a la 1.46 am todavía intentábamos conseguir adónde ir. Terminamos decidiendo ir a Palermo Bitch, así que fuimos con esa facha a la parada del 168, donde desfilamos para nosotras mismas, hasta que llegó el colectivo. Nos sentamos, el hombre de atrás mío no paró de decirme cosas del estilo de "qué linda te quedan la do colitaaa" hasta que, a la altura de Almagro, él se bajó, y se subieron un par de personas que fueron despedidas desde abajo por un hombre muy confundible con John Lennon. Yo estaba remarcando este hecho cuando me di cuenta de que ahora saludaba hacia nosotras. Entonces, pensando que saludaba a la ridiculez que éramos en general, le devolví, junto con Porthos, el saludo. Hasta que nos dimos cuenta de que era un conocido de Darth Vader y quisimos morir. Llegamos a un tal bar "Macana" o no sé qué, donde tomatmos un tequila sunrise y un daiquiri/licuado de durazno, decidimos que era una bazofia y huimos hacia nuestra segunda opción, un tal "Hummer". Cuando llegamos nos dimos cuenta de que era un bolicheto donde mis uñas brillaban poderosamente y teníamos que pagar 30 pesos cada una. Así que sigilosamente huimos hacia una estación de servicio donde compramos una leche chocolatada, un paquete de galletitas y uno de alfajorcitos y comimos mientras vimos a la novia que no es de Ricardo Fort, en un programa conducido por Jesica Cirio. Nos fuimos, casi echadas por el personal de la estación de servicio y volvimos a la base Barracas, créase o no, EN EL MISMO COLECTIVO EN EL QUE NOS FUIMOS DE ALLÍ. ¿Casualidad... o destino? ¿Magia... o ciencia? ¿Pioneras o pelotudas?
Las conclusiones fueron las siguientes:
1. No estamos hechas para la noche bonaerense.
2. La noche bonaerense no está hecha para nosotras.
3. Somos Chile.
4. Nunca vamos a ser gente qeu tiene onda porque no podemos parar de ser parodias de gente que tiene onda.
5. Somos The Mighty Boosh (ojalá!).
6. El día que vayamos a Inglaterra Noel Fielding no va a saber con cuál de nosotras quedarse así que va a volver a las drogas.
7. Si alguna vez rompemos un record Guiness va a ser el de la personas más impresentables jamás conocidas.

Comentarios

  1. Pelotudas, definitivamente.

    Por otro lado, Noel Fielding: yo puedo ser tu droga, oculto guantes en mi pelo batido à la Winehouse.

    ResponderEliminar
  2. Ah! Ya me olvidaba, los Moldy Peaches avisan:

    So if you are a kid and no one will play with you, stick it out, stay tough, and you'll turn out super-cool!

    ResponderEliminar
  3. Me llegó un mail de un tal Paul Kojo. Jajaja.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Periodismo independiente. Periodismo de investigación. ¿Dónde tenés la custodia?

No será el mago de Oz, PERO…

Otro eslabón del pedigrí