I'm troublesome
I don't understand what a girl in my position's to do. Y así, con esa cita de la canción "Never gonna happen", doy comienzo a esta entrada que viene a contarle a nuestra audiencia un poquito más sobre Lily Allen.
Lily nació en Londres, en una familia relacionada con el mundo artístico (papá actor, mamá productora, hermano actor). El padre de Lily abandona la familia (formando otra que le dará a esta inglesita problemática unos cuatro hermanos más) y la madre se queda con ella y los otros dos hermanos -una mayor y otro menor-, dando vueltas por diferentes barrios. Lily tiene problemas de conducta, se droga, la echan, abandona el colegio, vende éxtasis a los quince, en fin. Una chica que nace en una clase media, con miles de mandatos sociales en los hombros y un padre abandónico. Raramente bella, Lily tiene hoy 27 años. Y sigue dando qué hablar. No sólo se pelea con artistas británicos reconocidos, sino que sus comentarios a veces poco afortunados la llevan constantemente a disculparse en su blog en MySpace, espacio en el que opina sobre muchos temas (las últimas entradas son promocionales de sus shows, pero hay varias, no tan antiguas, acerca de la piratería en el mundo de la música y de cuán perjudicial es para las bandas-retoño del Reino Unido). Lily, más allá de que puede ser querida u odiada, parece tener algo que le falta a muchas cantantes y bandas británicas-y no solamente- actualmente: personalidad. Una chica con actitud, que nos dice 'fuck you very much' y nos ponemos a pensar si eso está bien o no, pero sin duda nos mantiene hablando de ella. Una chica de emociones fuertes.
A los 15 la dejó un novio y ella tuvo que internarse en una clínica por intento de suicidio con sobredosis de droga y corte de venas de por medio. Hoy, más de diez años después, cuenta con dos abortos y también dos hijas (Ethel Mary y Marnie Rose, nacida hace poco más de dos meses). Como verá la audiencia, en este breve tiempo de vida, ella ha pasado por grandes procesos que alteran a cualquier persona. Sin embargo, y si nos guiamos por las tradiciones culturales que nos apañan, pareciera que ha sentado cabeza: sus dos hijas nacieron producto de su matrimonio con Sam Cooper y ella ha empezado a utilizar su nombre de casada y todo, incluso en su blog. Parece que Pablo Milanés estaba en lo cierto al decir que el tiempo pasa y se va imponiendo siempre un pedazo de razón (y de temor).
Saber quién es alguien no es una tarea fácil. Podemos leer sobre los escándalos de Lily (que son primera plana, de acuerdo con ella, por ser mujer, porque si James Blunt se manda una, a nadie le importa demasiado), podemos leer sobre el primer aborto que tuvo, en el que perdió un bebé que habría tenido con el cantante de Chemical Brothers (con apenas dos meses de relación). Podemos leerla a ella, tratando de rebatir al cantante de Radiohead que apoya el 'file sharing' sin problema alguno. Podemos ver sus fotos, podemos ver sus videoclips y hasta charlar sobre los nombres que eligió para sus hijas. Pero quizá no importa tanto quién es, sino más bien qué nos da y qué nos hace sentir. Y tal vez por eso, deba contarles cómo llegué a ella.
Por supuesto que uno conoce a Lily Allen. A ver, Lanato usa su canción en su patético programa. La telenovela Ciega a citas usó esa canción (con letra propia) como cortina musical, en la voz de la mismísima Muriel Santa Ana. Pero haber tocado de oído no es lo mismo que llegar a ella. Y eso me pasó hace unos días, cuando el querido JEW, a quien he mencionado varias veces en este espacio, sufría con la sola idea de que cumpliría 22 años. Entonces, buscando en YouTube algo que me ayudara a calmarlo, me topé con uno de sus cortes más famosos "22". ¿Cómo no creer en las señales? Y ahí nomás hice click.
When she was 22 the future looked bright
But she's nearly 30 now and she's out every night
I see that look in her face, she's got that look in her eye
She's thinking how did I get here and wondering why
But she's nearly 30 now and she's out every night
I see that look in her face, she's got that look in her eye
She's thinking how did I get here and wondering why
Me atrajo la canción y algo en esa imagen de la chica de 22, brillante y hermosa, que contrastaba con la chica de 30, deteriorada antes de tiempo y con el maquillaje corrido, que me hizo prestar atención . Y ahí nomás, de nuevo, hice click. Conseguí el disco de 2009 (It's not me, it's you) y quedé prendada. Por ejemplo, con su bella y romántica canción "Who'd have known", en cuyo videoclip Lily secuestra a Elton John -porque lo ama- y lo lleva a su casa, atado de pies y manos, brindándole una cena romántica en un vestido de noche bellísimo y con un maquillaje muy rockstar. Muchos de los comentarios de YouTube se quejaban de que el video no tenía nada que ver con la tierna letra de la canción. ¿Pero no es acaso eso lo maravilloso? No es otra canción de amor, que nos hace sentir bien, que nos hace amar la vida. Es la canción de amor que se ridiculiza con un video impecable y prolijamente hecho, que nos hace reír y nos lleva al extremo amoroso del secuestro, cual hiciese el personaje Borat en el film homónimo con Pamela Anderson.
Put your arm around my shoulder
and it was if the room got colder
and we moved closer in together
and started talking 'bout the weather
You said tomorrow would be fun
and we could watch 'A place in the sun'
I didn't know where this was going
when you kissed me
Pero no sólo son canciones románticas que se preguntan qué es esto que siento, mientras una mira tele y toma vino. También está la melodía que nos ayuda a decirle a ese tipo al que no queremos ver ni en figurita que se vaya.
And please, can you stop calling?
'cause it's getting really boring
and I've told you I don't want to be friends
Believe me when I tell you that
I never wanna see you again
How on earth could I be any more obvious?
It never really did and now it's never
gonna happen with the two of us!
Lily entonces es un poco esta chica que no comprende lo que sucede con este chico (tal vez deba probar como Julia Roberts completar la escena con una cabra que toca el violín). Pero también es esta chica que no quiere herir a este chico y sin embargo le dice claramente 'no me llames más'. Lily es una mujer joven con cara de niña mala, pero que quiso ser madre y finalmente lo logró; una mujer que ha salido con varios músicos pero que se ha casado y parece tener un hogar, dulce hogar formado; Lily es una mujer que se pinta los ojos con delineador grueso que endurece la mirada pero que usa esos vestiditos de nena inglesa que disimulan la travesura; una mujer que insulta y se pelea, a veces quizá sin mucho argumento, y luego se disculpa en una red social; Lily es una mujer que hace canciones que son usadas por juegos como Los Sims o por periodistas rancios como Jorge Lanata; Lily es cada una de las descripciones que puedan caberle, pero a su vez parece escapar a todas las etiquetas. Vendía éxtasis a los 15 y ahora utiliza su canción en campañas que tratan de dar vuelta el mundo homofóbico en el que vivimos. ¿Es que acaso puedo yo darle el nombre preciso, la palabra exacta? ¿Puedo yo nombrar a Lily Allen, que como un delantero experto se desmarca de todas las vallas defensivas que quieren atravesarle? ¿Es ella lo que Joss Stone diría 'a little girl who found her way'? Tal vez ella era alguien que después ya no fue, el cauce de estrella fugaz. Tal vez hemos llegado a un punto de madurez en ella, que la maternidad podría haber contribuido a alcanzar, que pueda aparecer en su canción "Back to the start".
This is not just a song
I intend to put these words into action
I hope that it sums up the way taht I feel
to your satisfaction
Esta es la Lily de ahora. Quizá mañana se desmarque nuevamente. Y entonces, será el agua del río que nunca es la misma. Pero seguramente podremos seguir sumergiéndonos en ella, y salir satisfechos.
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